SABRINA CONTRA EL IMPERIO DEL ZAPPING, DE REBECA RUS

Título: Sabrina contra el imperio del zapping
Autora: Rebeca Rus
Editorial: Esencia
Nº de páginas: 451
Presentación: Rústica con solapas
Género: Chick lit
Publicación: Junio 2009

SINOPSIS:

Sobre el papel, la Nueva Vida de Sabrina (NVS) parece infinitamente mejor que la Antigua Vida de Sabrina (AVS): ha triunfado en su agencia y ha conquistado al chico de sus sueños.

Sin embargo las cosas nunca son lo que parecen y, aunque Sabrina está luchando por convertirse de una vez por todas en una adulta de pro, no cuenta ni con su naturaleza inquieta, ni con una sombría trama de corrupción que está a punto de trastocar todos sus planes. Por no mencionar que Nico, su chico, parece un poco distraído últimamente...

Además, el mundo de la publicidad está en peligro y para salvarse necesita a alguien con talento, con iniciativa... y que también sea un poco inconsciente, la verdad. ¡Tiembla, mundo, porque Sabrina vuelve dispuesta a todo!

Lo primero es lo primero, y es darle las gracias a Dácil, ya que gracias a ella he podido leer tanto este libro como el otro de Sabrina: 1 - El mundo: 0. Descubrí a esta autora con Diez maneras diferentes de ser Laura, y consiguió conquistarme. Como Dácil tenía los libros y no es amante de este género me los ofreció, aunque yo no los había leído hasta ahora. Sólo me falta el último y terminaré haciéndome con él, ya que Rebeca Rus, en mi opinión, es la mejor representante del chick lit español.

La novela es perfecta para esta época del año, ya que es fresca, ligera, fácil de leer... son términos con los que se califican a este tipo de historias y que a mi me recuerdan a algo light más que a un libro. Personalmente te diré que es un tipo de lectura que me gusta mucho, y en cualquier época del año, no necesito estar en vacaciones para disfrutar de una lectura sencilla, pero que me hace reir a carcajadas, y con este libro te aseguro que lo harás.

Aunque no hayas leído el primer libro de Sabrina, puedes leer este perfectamente, ya que Rebeca Rus nos pone en antecedente de lo que ha pasado con una breve descripción de los personajes a medida que aparecen en la vida de Sabrina, así que no te vas a perder nada, sólo el placer de leer el otro libro.

He tenido la impresión de que es una continuación del anterior, ya que prácticamente es más de lo mismo. Comienza igual, soñando con Ewan McGregor, tiene que resolver otra situación conflictiva en la agencia de publicidad, tiene problemas amorosos, y las antiguas compañeras de piso continúan haciendo locuras. Pero cuando algo te gusta, te da lo mismo que sea repititivo si consigue, como así ha sido, sacarte una buenas carcajadas.

De la historia en sí me gusta contar poco, ya que creo que es mejor que lo descubras en la lectura, pero no me resisto a decirte que mi personaje favorito es Candela, muchísimo más peculiar que la propia Sabrina. Si en el anterior libro se empeñaba en que estaba embarazada e iba a dar a luz con un sólo mes, en esta ocasión pretende organizar su boda. Sólo hay un pequeño inconveniente, Candela no tiene novio. Desternillante es la sesión en el spa para futuras novias de la que Sabrina termina saliendo a la carrera. Como es de esperar, los diálogos más locos se producen cuando Candela está por medio:

-¿Creéis que soy muy joven para casarme?

-Creemos que eres demasiado soltera para casarte. ¡Si no tienes novio siquiera!

   *****

-¡CANDELA! Te lo estoy diciendo en serio. Sé que te sientes sola y que estás aburrida, pero, sinceramente, prefiero que te dediques a fingir enfermedades que a organizar bodas.
-¡Yo no fingía nada!
-Vale, vamos, sí.
-¡En serio! -replica enojada-. Eran todas psicosomáticas, y como sigas hablándome así, me refugiaré en la bebida -me amenaza-. Más que antes.
-No, Candela, no bebas. La bebida es malísima para el hígado, y dicen los científicos que un litro de alcohol puede matar miles de neuronas; tú no te puedes permitir ese lujo.

En definitiva, si eres amante del chick lit y no conoces a esta autora, ya estás tardando en hacerlo, te aseguro que merece la pena y me reafirmo en considerarla la mejor representante española. Si no te gusta el género, sólo te puedo tentar a que lo pruebes, según parece, es la época adecuada, seguro que no te arrepientes. Cuatrocientas cincuenta páginas te van a saber a poco.