LAS RANAS TAMBIÉN SE ENAMORAN, DE MEGAN MAXWELL

Título: Las ranas también se enamoran  

Autora: Megan Maxwell

Editorial: Versátil Romántica

Nº de páginas: 381

Precio: 15.90 €

SINOPSIS:

"Marta Rodríguez es una joven y divertida madre soltera que conduce una Honda CBF 600. Trabaja en el taller de moda flamenca de Lola Herrera, donde hace un poco de todo. Pero la vida de Marta, y su entorno, dará un giro de 180 grados cuando el hijastro de su jefa, Philip Martínez, un empresario inglés, serio a la par que sexy, se cruce en su camino."

Con esta reseña participo en mi segunda lectura conjunta que, esta vez, ha sido organizada por Patri, del blog Estrellas y Páginas. Tengo que decir que desde que vi el avance de la portada de este libro me llamó la atención y sabía que tenía que leerlo. Después de leer tantas reseñas, una vez que lo tuve en mis manos me decidí a comprarlo y, ya de paso, como había visto que se organizaba esta lectura conjunta, pues me apunté, ya que acababa de terminar la primera en la que participé, y me quedé con ganas de más.

Como anécdota decir que mientras yo me compraba la 3ª edición, en península ya iban por la quinta, debe ser que, además de una hora menos, en Canarias tenemos dos ediciones menos.

Según llegué a casa me dispuse a leer el primer capítulo y mi primera impresión fue: "no me va a gustar". Esto me ha pasado con varios libros de los que leo muy buenas reseñas y después, tal vez por tener muy altas expectativas, no me terminan de convencer, así que lo dejé aparcado y continué con el libro que me estaba leyendo en ese momento.

Ahora voy a hablar de la edición, ya he comentado que la portada me enamoró desde el primer momento que la vi, y creo que es una parte muy importante del éxito de este libro. Sin embargo, una vez que abres el libro te encuentras con un formato muy normalito, para mi gusto muy serio, que choca con las ranitas que aparecen al principio de cada capítulo.

Sigo con dos cosas que me parecieron excesivas en este libro, lo primero, el dichoso "miarma". Creo que Lola lo usa prácticamente en el 90% de sus frases, y llega a ser repelente, por lo menos a mi me lo pareció. Todavía si hubiera sido un "quillo / quilla", pues lo hubiera llevado mejor. Vamos a ver, que yo soy canaria y no estoy todo el día con el "chacho", igualmente no creo que los sevillanos hablen así en todo momento. Un poco es gracioso, mucho resulta pesado.

La segunda cuestión  que me pareció excesiva fueron las escenas de sexo. Pensaba encontrarme con una historia de amor y me quedé con una relación sexual. Este punto me lleva a plantearme si se puede clasificar como una novela juvenil. Con esa portada tan simpática y una sinopsis tan inofensiva... no sé si el hecho de tener el sello de Romántica equivaldrá a esa clasificación, pero yo no contaba con eso.

Y ahora voy con lo que creo que le faltó, un poquito más de descripción explicativa. Un ejemplo, no tengo ni la más mínima idea de coches ni de motos, pues, inconscientemente, yo leí en la sinopsis "Marta conduce un Honda", en lugar de "Marta conduce una Honda". Hasta bien avanzado el libro no me enteré de que Marta conducía una moto y, hasta más de la mitad del libro, seguía sin saber que era una moto de grandes dimensiones.

Respecto a la sinopsis, es la primera que me encuentro con spoiler, ya que te dicen que Philip es el hijastro de Lola, cuando al comienzo del libro no existe ese parentesco.

Otro aspecto que me gustaría comentar es el estilo narrativo que usa la autora, me costó mucho diferenciarlo del lenguaje coloquial que usan los personajes. Por momentos, no sabía si leía narración o diálogo, creo que no deben usar el mismo estilo y, en mi opinión, la autora no lo ha conseguido.

"En ese momento quedó libre la barra y los señoritingos se dieron la vuelta con rapidez y   comenzaron a pedir. Pero la guiri y Marta no se lo iban a permitir,..."

Sobre la historia en sí, me recuerda a una telenovela, hay momentos en los que los protagonistas lo tienen todo para ser felices, pero se empeñan en seguir sufriendo. He leído alguna reseña en la que se criticaba tanto a Marta como a su hija por esta actitud, y estoy totalmente de acuerdo, hay momentos en que no hay forma de entender lo que hacen. Aunque he de reconocer que, a mitad del libro ya aventuras lo que le va a suceder a Marta y, por último, es imposible no sentir ¿pena? por ella. Realmente no se qué fue lo que me transmitió, pero sí me emocionó verla en esa situación.

Y después de todo esto seguro que piensas que el libro no me gustó, pues no es eso, simplemente que no es lo que esperaba, no se corresponde con lo que yo entiendo por chick lit. Es verdad que tiene varios toques graciosos, pero al final de la historia la autora es capaz de ponerte unos nudos en la garganta de la emoción, que poco te falta para llorar, me faltó muy poquito. En fin, que a mi lo que me gusta es reir a carcajadas, no entiendo las lágrimas en el chick lit, si es que no son de risa.

Concluyendo, un libro que ha tenido una publicidad impresionante (consiguió que lo comprara en lugar de sacarlo de la biblioteca) con el que se puede pasar un rato muy entretenido. Sin embargo, a mi modo de ver, esto no es chick lit.