Autor: Alberto Vázquez-Figueroa
Editorial: Ediciones B
Nº de páginas: 324
Publicación: Noviembre 2014
Serie: 2º Medusa
SINOPSIS:
«Por fin he escrito mi novela más importante.» Alberto Vázquez-Figueroa
Un valiente alegato contra la pobreza, el hambre y la injusticia.
Ochocientos cuarenta y dos millones de personas en el mundo no tienen suficiente para comer. La desnutrición mata a más de dos millones y medio de niños cada año. Sesenta y seis millones de niños van todos los días con hambre a la escuela.
Alberto Vázquez-Figueroa pone el foco en el mayor problema de la humanidad, el hambre, en esta novela extraordinaria que es un valiente alegato contra la injusticia, la pobreza y las indignantes desigualdades que toleramos a diario.
Los personajes que conquistaron a miles de lectores en su best seller Medusa vuelven a desfilar por las páginas de Hambre, cuya acción transcurre entre la indiferencia de los países occidentales y la desesperada miseria del África subsahariana.
Aunque Vázquez-Figueroa diga que "esta es la única novela por la que le gustaría ser recordado" es evidente que no es la mejor que ha escrito y yo no se la recomendaría a alguien que no se haya iniciado con el autor. En cambio, sus fieles lectores, leemos todo lo que publica. Prueba de ello es que alguien de la editorial informó en twitter que llevaba 3 ediciones vendidas en el primer mes.
Se vio obligado a admitir que como inicio de un relato de aventuras aquella historia poseía una innegable fuerza, aunque sabía mejor que nadie que proliferaban las historias que prometían mucho en sus primeras páginas pero acababan decepcionando porque, a semejanza de los globos, una novela nunca ascendía si no se la hinchaba lo suficiente. pero demasiado a menudo estallaba por exceso de presión.
Este párrafo es la mejor definición de esta novela. Tal vez lo escribió intuyendo cuál iba a ser el resultado de un libro que tenía que ser escrito en un plazo determinado, sin embargo, creo que también es justo dar un argumento para comprarla puesto que esconde una posible solución al hambre de África. Podría contártela, porque en todas las entrevistas que le han hecho él lo ha revelado, pero te quitaría el interés por leer el libro. Además, no sé si habrá donado los derechos para ponerlo en marcha pero sí le he escuchado decir que no cobró ningún adelanto y que cede la patente de forma gratuita para quién quiera ponerla en marcha. Desgraciadamente, como tantas veces, nadie se ha puesto en contacto con él.
El protagonista del libro, que ya apareció en Medusa, tiene mucho del autor. Incluso me atrevería a decir que la mujer de la protagonista también tiene algo de la suya. En la novela no nos da la solución de forma automática, a través de conversaciones con su mujer es cómo lo llega a plantear. Me ha gustado la forma de hacerlo puesto que, en vez de exponerle su teoría, no hace más que decirle que "piense". Yo no voy a ser menos y también te voy a dejar pensando: ¿cómo es que la FAO no se ha dado cuenta de que están enviando arroz, que necesita el doble de agua para cocinarse, a unos países que carecen de ella?.
Hambre es la continuación de Medusa y, si bien se puede leer de forma independiente, sería conveniente leer primero la otra novela. Pese a que aparecen los mismos personajes, parece que los principales ceden el protagonismo a otros que en la anterior eran secundarios. Al terminarlo me he quedado con la misma sensación que tuve al acabar Medusa, tiene toda la pinta de que tendrá continuación y el argumento girará en torno al ébola, pero de momento no hay noticias al respecto.
No me cansaré de decir que lo mejor de los libros de Vázquez-Figueroa es su forma de contar las historias. El argumento es la excusa para dar su punto de vista sobre diferentes temas de actualidad. En esta ocasión no solo se plantea el tema del hambre, sino las reuniones en Davos en las que unos pocos deciden lo que afecta a millones o cómo el conflicto de Ucrania esconde intereses económicos.
En resumen, a pesar de que Hambre no es la mejor novela de Vázquez-Figueroa me encantaría seguir leyendo las aventuras de sus personajes en el continente africano.
De Vázquez-Figueroa me gustó mucho la serie de piratas y corsarios y el Caribe, pero después de eso no he leído nada más de él. Y eso que mi padre es muy fan y tiene todos los libros. Precisamente hace un par de días acabó éste. Se lo robaré un día de éstos.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola.
ResponderEliminarCoincido contigo, no es una de sus mejores novelas, pero él nunca me ha defraudado.
Besos
´De este autor solo he leído Tuareg, que me encantó, así que no sé por qué no he vuelto a acercarme a su obra. Me tientas con este libro, aunque digas que no es lo mejor que ha escrito.
ResponderEliminarBesotes!!!
Yo no me he estrenado con este autor. Me da cierta pereza
ResponderEliminarEspero leer dentro de poco Garoé, ¡a ver si logro reconciliarme con el autor, del que leí algo de joven y me acabé cansando! 1beso!
ResponderEliminarLeí alguna novela de Vázquez Figueroa y desde luego que es un gran narrador. Y no me olvidaré del placer de haberlo tenido en antena en mi espacio cultural en Onda Cero Barbanza. Aún no me lo termino de creer. Bss.
ResponderEliminarEstaba esperando tu reseña de la novela para saber si me ponía con ella, en cuanto a este autor eres mi mejor referente. Lo había visto por la biblio y pensaba traermelo pero creo que entonces buscaré otra de él para comenzar. ¿Medusa tal vez?
ResponderEliminarEl tema que trata es horrible y lo peor es que los que pueden hacer algo ni lo hacen ni lo harán jamás.
Un beso
Medusa me gustó más que este pero no lo recomendaría como primer libro a leer del autor. Siempre digo que el que más me ha gustado es Tuareg, si buscas uno con historia romántica puedes leer Fuerteventura y la trilogía de Océano también es muy buena.
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