Título original: Shut Your Eyes Tight
Autor: John Verdon
Traductor: Javier Guerrero
Editorial: Roca Bolsillo
Nº de páginas: 552
Publicación: Mayo 2013 (1ª en este formato)
Serie: 2º David Gurney
SINOPSIS:
Dave Gurney el protagonista de la primera novela de John Verdon, Sé lo que estás pensando, vuelve para enfrentarse al caso más difícil de su carrera, una batalla con un adversario implacable que no sólo es un inteligente y frío asesino, sino que no tiene reparos en atacar directamente al punto débil de Gurney: su esposa.
Ha pasado un año desde que el ex detective de la policía de Nueva York consiguió atrapar al asesino de los números y, aunque es su intención retirarse definitivamente junto a su esposa Madeleine, un nuevo caso se le presenta de forma imprevista. Una novia es asesinada de manera brutal durante el banquete de bodas, con cientos de invitados en el jardín y ese es un reto al que es imposible resistirse.
Todas las pistas apuntan a un misterioso y perturbado jardinero pero nada encaja: ni el móvil, ni la situación del arma homicida y sobre todo, el cruel modus operandi. Dejando de lado lo obvio, Gurney empieza a unir los puntos que le descubrirán una compleja red de negocios siniestros y tramas ocultas llevadas por un sádico...
Voy a comenzar esta reseña de un modo distinto, con un alegato a favor del libro de bolsillo. Ya no hay excusa para decir que no se lee porque la cultura es cara. Cuando empecé a leer la obra de Vázquez-Figueroa tenía dos opciones: comprarme el último libro en tapa dura o, por el mismo precio, 3 en edición de bolsillo. Seguro que sabes cuál fue mi decisión. Luego llegó un momento en que los había leído todos y "no me quedaba más remedio" que comprarlos según salían, pero ya no me importaba, se había convertido en mi autor favorito y no podía esperar para leer lo último que había publicado.
Creo que todos estaremos de acuerdo en que cuanto menos impuestos paguemos mejor pero, no es lo mismo enfrentarse a un libro de 20 € que a uno de 7, como este que traigo hoy. Supongo que las editoriales se han dado cuenta y las ediciones de bolsillo que nos presentan son cada vez más cuidadas. Aunque no es tapa dura, tiene un plastificado que le da mucha más consistencia que una tapa blanda. El único inconveniente es que la letra es un poco más pequeña y hay que esperar un poco más, pero por eso es más económico. Me falta por leer el 3º así que todavía tengo tiempo, para los que ya se lo han leído, el próximo mes sale el 4º libro de la serie: No confíes en Peter Pan.
Sería imposible hacer la reseña sin compararlo con el primer libro de la serie. Sé lo que estás pensando me gustó tanto que, superarlo o igualarlo, iba a ser un poco complicado. Efectivamente, eso es lo que ha ocurrido; no quiero decir que no haya sido una buena lectura, me gusta el estilo de Verdon, solo que tenía el listón demasiado alto. El primero fue totalmente adictivo, era imposible parar de leer. Si bien con este libro no he tenido la misma sensación, debo decir que cada vez que he terminado una de las tres partes en que está dividida la novela me he quedado igual que si viera el final de un capítulo de serie que concluye con la palabra "continuará..." Y digo que ocurre en las 3 porque en la última hay un asunto que a mi no me queda nada claro, así que me gustaría comentarlo con quienes hayan leído la novela. Cuidado con encontrarse algún spoiler en los comentarios.
En la parte de investigación Gurney nos sigue sorprendiendo con su sexto sentido para descubrir cosas que otros policías no encontraron. Aunque aparecieron en el primer libro, hace tanto que lo leí, que no me acordaba de alguno de ellos, pero el autor los sitúa perfectamente. Respecto a la identidad del asesino, fue lo primero que pensé cuando le presentaron las pruebas al protagonista, pero enseguida lo descarté. A falta de 100 páginas seguía sin saber quién podía ser, no son muchos los candidatos, así que me decepcionó que finalmente fuera mi opción inicial.
La trama que nos presenta en esta ocasión me parece muy original: chicas que han sufrido abusos y, a la vez, se los infringen a los que tienen alrededor. Pese a que no me parece muy realista, es lo que obsesiona a una mente perturbada de la que solo tenemos conocimiento en contados capítulos que se distinguen por la letra cursiva.
En mi opinión, todas las series de detectives se pueden leer de forma independiente, pues son casos cerrados. El único inconveniente es que nos perdemos la evolución de los personajes. Esa era una de las cosas que me atraía al enfrentarme a este libro, saber qué iba a pasar con el matrimonio de Gurney. Apenas ha habido cambios: él sigue disfrutando con su labor de detective retirado y ella se lo reprocha puesto que quiere disfrutar de una jubilación tranquila. A lo más que ha llegado ha sido a espetarle un "¡cabrón!" en un momento determinado. Así que tendré que seguir esperando a leer los siguientes libros, espero que el autor de un paso más en este sentido.
Pese a que no ha estado al mismo nivel que el primero de la serie, me quedo con ganas de leer los siguientes libros, Verdon sabe cómo mantener la intriga. Además, creo que Sonya, la marchante de arte, nos puede deparar alguna sorpresa.
Gracias a Roca Editorial por el ejemplar.
Esta reseña forma parte de Octubre, mes de las sagas.