lunes, 5 de agosto de 2013

VÁZQUEZ-FIGUEROA Y LOS TRENES

En la última entrada publicada en su blog pide que la idea circule y aquí estoy yo para darle un poco de publicidad, pese a que en esta ocasión no comparto su opinión. Por mucha maquinaria que inventemos siempre existe la posibilidad de fallo humano.

Hace tres años le envié al Ministerio de Fomento y a Renfe un sistema de prevención de accidentes que había registrado y me contestaron que los trenes españoles eran los mÁs seguros del mundo. Ahora vemos que no es así.

No pretendo beneficiarme de tanto dolor, pero si alguien puede hacer que esta idea circule y se puedan evitar nuevas catástrofes muchos lo agradecerían en el futuro.

Expediente nº12/RTPI-004499/2010

COMO PREVENIR ACCIDENTES DE TREN

La primera locomotora a vapor avanzaba a una velocidad máxima de ocho kilómetros por hora; las actuales superan los trescientos.

Mucho ha mejorado el transporte por ferrocarril en poco menos de doscientos años pero por desgracia existe un punto en el que no lo ha hecho en idéntica proporción: la prevención de accidentes.

En los últimos tiempos se han producido varios accidentes con un doloroso y considerable número de víctimas a lo que hay que sumar un alto costo económico.

Casi todos se debieron a que un obstáculo colapsó la vía o a un corrimiento de tierra causado por las lluvias y en ningún  caso los maquinistas tuvieron posibilidad de evitar la colisión ya que su velocidad era excesiva en relación al tiempo de reacción y el espacio necesarios para conseguir que el convoy se detuviera.

No debería considerarse “fallo humano” al tan directamente relacionado con la carencia de “espacio-tiempo” a la hora de detenerse porque no se le pueden exigir los mismos reflejos a un maquinista que conduce un tren a trescientos kilómetros por hora, que los que se le exigían a quienes los conducían a cien.

El ser humano y su capacidad de visión siguen siendo por desgracia las mismas ya que el hombre no ha mejorado sus condiciones físicas al ritmo que las maquinas.

Ni frena en el mismo espacio un tren a trescientos kilómetros por hora que lo que frenaba a cien.

Con objeto de obtener la necesaria ampliación de ese “espacio-tiempo” de reacción, he diseñado  lo que he dado  en llamar “Explorador de Alta Velocidad”.

Esencialmente su funcionamiento es el de una locomotora de similares características que la del tren al que precederá, pero de mucho menor tamaño.

No está tripulado puesto que en realidad se trata de una “lanzadera-robot” que  hace las veces de “pez-piloto” ya que, por medio de cámaras de televisión y dispositivos de alarma mantiene al corriente  en todo momento al maquinista sobre el estado de la vía.

La distancia que separa al tren del “Explorador” se encuentra determinada por la velocidad de la marcha así como por el espacio que necesitará el convoy a la hora de detenerse con suavidad sin llegar a colisionar con el obstáculo.

Los programas de ordenador de que disponen tanto la locomotora como el “Explorador”, y que funcionan conectados entre sí, determinan en todo momento qué velocidad, y por lo tanto qué distancia, deben separarlos con el fin de evitar cualquier riesgo de alcance y garantizar una frenada sin sobresaltos

El sistema se encuentra automatizado y conectado con el “Control Central de la Red Ferroviaria”, pese a lo cual el maquinista siempre está en capacidad de ordenar al “Explorador” como debe actuar ante la proximidad de un cambio de agujas, una estación intermedia o una detención no programada.

También va provisto de un rastreador capaz de detectar la más mínima alteración en su recorrido a base cotejarlo metro a metro con la información que previamente ha almacenado en su sistema informático. Esa memoria visual de altísima precisión constituye el alma de su funcionamiento ya que en cuanto detecta la más ligera diferencia entre lo que “Ya ha visto” y lo que “ve” alerta del peligro, especialmente en aquellos lugares en los que cabe la posibilidad de un atentado terrorista.

De igual modo cuenta con un inhibidor de señales de radio que evita un atentado desde larga distancia durante el tiempo que tarda en pasar el tren.

Al avanzar ambos a idéntica velocidad su capacidad de frenada será tanto mayor cuanto menor sea su masa en relación a la del tren ( fi=ma ) ,  y por el hecho de no ir tripulado y todos sus elementos están sujetos no sufre en exceso los efecto de la inercia.

En caso de emergencia suelta un gran paracaídas muy visible que le ayuda a detenerse con mayor facilidad.

Cuando el tren esta a punto de entrar en la estación final de trayecto, el “Explorador” se desvía hacia un estacionamiento en el que aguarda hasta el momento en que debe salir para ponerse al frente de un nuevo tren.

Debe ir pintado de colores llamativos y emitir un agudo pitido de alarma hacia el frente de tal manera que no moleste a los viajeros pero sirva para anunciar su llegada seguida de la de la totalidad del tren, lo cual evita de igual modo gran numero de accidentes en los pasos a nivel sin barreras y en las estaciones en las que los pasajeros cometen la imprudencia de atravesar las vías.

Su coste puede cifrarse en torno a los 25.000 €, lo que resulta muy bajo en relación con sus prestaciones, y debería estar subvencionado por las compañías aseguradoras que  son las mayores beneficiarias de sus servicios dado que les ahorrará enormes sumas en el pago de indemnizaciones.

 © ALBERTO VAZQUEZ-FIGUEROA



En muchas ocasiones he contado que esta autor abarca distintas temáticas y que, por desgracia, se suele adelantar a los acontecimientos. Ahora mismo no lo recuerdo muy bien, porque este libro es del 2008, pero el problema que se planteaba en esta ocasión era debido a la especulación.

SINOPSIS:

Aquiles Troyano es un ingeniero de caminos que ocupa un puesto de responsabilidad en la Administración del Estado y que se ve envuelto en una investigación para denunciar un caso de corrupción dentro de su propio ministerio, como consecuencia del cual se producen hundimientos y accidentes en la construcción del Tren de Alta Velocidad. Lúcida y premonitoria, en Vivos y muertos Vázquez Figueroa demuestra conocer a fondo los entresijos de las tramas de corrupción capaces de anteponer sus propios intereses incluso a la seguridad y hasta la vida de los futuros pasajeros.

No sé si será oportuno o no, pero después de ver un montón de tertulias en las que todo el mundo parece ser un "experto" en estos temas, creo que no está de más otro tipo de información.

Desde aquí aprovecho para mandar mucho ánimo para las familias de los fallecidos, mucha fuerza para los heridos que se tienen que recuperar, agradecimiento a los que acudieron a ayudar y no podrán borrar de su memoria lo que vieron y oyeron y, también, porque no me olvido, fortaleza para el que tiene que vivir con tantos muertos bajo su conciencia.

11 comentarios:

  1. Ha sido un golpe muy duro para muchísimas personas y ojalá no hubiera ocurrido nunca y se pongan soluciones o lo que se tenga que hacer al igual que con el conductor.
    Yo la verdad es que procuro pensar poco en ello.
    Un beso!

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  2. Brrrr, qué premonitorio. Estoy también más en tu pensamiento de que el fallo humano siempre está ahí y siempre estará, aunque pienso que tienen que darse una combinación de situaciones y fallos en cadena para que se produzca finalmente un fallo humano dentro de cualquier sistema de seguridad. Ni siquiera eliminando el "factor humano" se garantizará cien por cien nada, porque las máquinas y la tecnología tampoco es infalible.

    Y la verdad, que parece oportunista el artículo, aunque también es verdad que en las grandes desgracias siempre pasa que salen especialistas y comentaristas del tema de debajo de las piedras :(

    Saludos (y que mi lumbago ya va mucho mejor, gracias!)

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    1. No considero al autor un oportunista, puesto que este expediente se entregó hace 3 años. Simplemente lo ha sacado a la luz a raíz del accidente que él considera que se podría haber evitado con este aparato. Otra cosa es que sea lo más adecuado plantear ahora el debate, pero insisto, estoy cansada de ver en la televisión a todo tipo de personas hablando del tema y algunas con muy poco tacto. Por otro lado, también hay que tener en cuenta que la noticia lo es mientras está en los medios, en cuanto llega otra nos olvidamos por completo. Además, vivimos en un país en el que se niegan a cambiar las leyes "en caliente" y por eso nunca se puede cambiar la ley del menor, por poner un ejemplo.
      Debates aparte, me alegro de que estés mejor.

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  3. Me encanta este hombre, lo respeto muchísimo en sus opiniones y creo que el escrito que nos presentas es magnífico. basado en datos y observaciones y no en hechos tristes acontecidos recientemente.
    Lo que no he leído es el título con el que completas la entrada, lo voy a buscar
    Besos

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    1. Este libro sale en la versión económica de bolsillo "Leer no cuesta nada" de 2.99

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  4. Premonitorio, sí. Y desde luego en este accidente, no solo ha habido un fallo humano, aunque lo que interesa es verlo así. Ha habido muchos fallos humanos, desde el momento en que el día de la inauguración se reconoce que la curva es peligrosa... Pero ahora mismo interesa que la culpa sólo recaiga en una persona.
    Besotes!!!

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  5. Siempre se agradece otro punto de vista. Y ya sabe que la realidad supera la ficción.

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  6. Seguramente todo se puede mejorar y no le quito razón al autor del que ya he leído otras veces que de vez en cuando tiene ideas de mejora que intenta compartir con todos.
    Espero que otras de sus ideas hayan tenido más éxito que esta a la hora de ser escuchadas, pero creo que en este caso se han dado una serie de problemas que por desgracia han traído este terrible accidente. Una curva que no debería existir, un fallo humano y seguramente más cosas que no conocemos porque nunca nos cuentan todo ni toda la verdad.
    Esperemos que no vuelva a ocurrir nada parecido.
    Un saludo.

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  7. Vazquez Figueroa es uno de mis escritores favoritos, tengo muchos libros suyos, además me parece un gran pensador, tengo mucha admiración por él.

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  8. Vázquez Figueroa es un hombre que es un lujo leer sus novelas y escucharle. Tuve el placer de tenerlo en dos programas seguidos en mi espacio cultural en Onda Cero comarcal. Sus presencia en antena cerró nuestro curso cultural y con una expetación enorme. Fue toda una gozada disfrutar de su conversación. Una persona cercana, amena y para nada oportunista. Tiene las ideas muy claras y lo expresó claramente cuando nos comentó algo sobre sus proyectos. Quien quiera escucharlo, con gusto se los paso. Es un hombre con una cabeza muy bien amueblada, como se suele decir en estos casos.

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  9. Muchos escritores han previsto situaciones que luego se han dado en la realidad, lo da la mente creativa, supongo.
    Interesante propuesta. Sólo espero que sea de ayuda.
    Besotes en movimiento.

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